EFE.- El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil detectó en junio numerosos incendios consecutivos en este monte, lo que hizo sospechar de que fuera provocados.

Por ello, comenzó un dispositivo de vigilancia en colaboración con la Brigada de Investigación de Incendios del Principado de Asturias, que dio sus frutos el pasado día 13.

El detenido, de 53 años y vecino de Gijón, está imputado de un incendio forestal por imprudencia grave por la quema que llevó a cabo el 13 de junio de rastrojos en una finca de su propiedad.

El fuego comenzó al extenderse las llamas a una zona de eucaliptos muy próxima, calcinando 1.500 metros cuadrados de terreno, para cuya extinción fue necesaria la intervención de Bomberos de Gijón.

El arrestado carecía de autorización para la quema de rastrojos, ya que en esas fechas está prohibida para particulares debido al riesgo de incendio que puede existir en la época estival.

Tras prestar declaración, el detenido fue puesto en libertad y las diligencias fueron remitidas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Gijón.

El resto de incendios en la zona no están relacionados con éste por lo que el Seprona continúa con la investigación y no descarta más detenciones.

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