EFE.- Así lo ha anunciado ayer el vicepresidente de la Institución altoaragonesa, Miguel Gracia, con motivo del inminente inicio de la campaña de recolección trufera.
En resumen, el decálogo propone potenciar el consumo de la trufa autóctona, adquirir el producto en canales oficiales que garanticen su calidad y especificar en los restaurantes el origen y variedad de la trufa.
Por su parte, el presidente de la Asociación de Truficultores de Huesca, José Vicente Girón, ha manifestado a los medios de comunicación que las condiciones climatológicas que se han dado en los últimos meses hacen preven una «buena» campaña trufera.
Girón, quien asistió a la presentación del decálogo, señaló que las primeras plantaciones de trufa cultivadas en Huesca ahora hace diez años empezarán en 2014 a dar sus primeros frutos a los productores.
Los datos aportados en la presentación indican que en la provincia de Huesca se cultivan alrededor mil hectáreas de trufa por un total de 280 truficultores.
Del total de hectáreas, unas 700 corresponden a las que se han creado con las subvenciones promovidas por la Diputación de Huesca para favorecer la promoción y cultivo de la trufa negra autóctona.
Por otra parte, el vicepresidente de la DPH adelantó que el CIET (Centro de Investigación y Experimentación en Truficultura de Huesca) trabaja en la actualidad en la creación de una red de parcelas colaboradas de titularidad privada para profundizar e la investigación sobre las condicione óptimas del cultivo.
De momento la respuesta de los truficultores ha sido muy elevada, puesto que han puesto a disposición de la Institución más de 50 parcelas.
En estos momentos, explicó Gracia, se está recopilando toda la información posible de cada una de las parcelas, para que la dirección científica del CIET determine qué parcelas integrarán esta red.
Además, la Diputación de Huesca continuará con las subvenciones a las plantaciones de trufa autóctona, con una partida prevista para 2014 de 300.000 euros.