Alfredo Berrocal / Presidente de UGAMA

Explicar lo que es ser agricultor y ganadero, a veces, no es fácil. Como en muchas otras ocasiones, hasta que no se vive en primera persona, no se puede comprender completamente lo que es dedicarse al campo y el trabajo diario que conlleva.

Un trabajo agradecido porque estamos en contacto con la naturaleza, porque tenemos la posibilidad de vivir en pequeños pueblos donde nos conocemos todos y recibir el calor humano de sus gentes, ayudándonos unos a otros en nuestro día a día y contribuyendo, cada uno en lo suyo, a dinamizar el medio rural y generar riqueza para que el éxodo se frene creando, también, mercados de proximidad y Km 0.

De un tiempo a esta parte, sin embargo, la fauna salvaje nos está comiendo literal. El lobo, la cabra montesa, las palomas o los conejos dañan el cultivo o atacan nuestro ganado. Eso y cuando no, se convierten en una amenaza en cuanto a transmisores de enfermedades como la tuberculosis bovina.

Este es el panorama del campo madrileño hoy. Y de muchos campos de otras Comunidades Autónomas, con más peso que la nuestra, la verdad. Pero no por ello hay que restarle importancia como nos quieren hacer creer.

Este es el escenario, en el que trabajamos día tras día, con nuestras alegrías y con nuestras preocupaciones. Con nuestros madrugones, nuestro esfuerzo y la satisfacción de estar haciendo una excelente labor, para la alimentación de la Comunidad de Madrid y también para nuestros sucesores, a los que les dejamos en legado, una naturaleza cuidada y una tierra que sobrevivirá, porque nos empeñaremos en que así lo haga.

Justamente esto es lo que defendemos cuando nos reunimos con la Administración. Que somos ganaderos y agricultores y no entendemos de sofás ni de despachos. Entendemos de campo y defendemos los intereses de todos los que sienten ese viento fresco cada día cuando se levantan para hacer su trabajo, vengan de donde vengan y voten a quien voten en política.

Esto es lo que más nos define y lo que es UGAMA. Y lo que lleva siendo desde que nació, hace 10 años, cuando nos miraban con desconfianza. Después de mucho andado, no hemos perdido nuestra esencia.

Nos da igual quien gobierne porque a quien lo haga, le diremos las cosas como están y como son, le haremos llegar las demandas de nuestros agricultores y ganaderos, dialogaremos hasta la saciedad y saldremos a la calle cuando toque.

De los últimos cuatro años, hacemos un balance bastante positivo. En nuestro haber tenemos el conseguir hacer valer las indemnizaciones por daño de lobo o una mayor ejecución de los PDR, uno de nuestros caballos de batalla por el que hemos traído a la Administración por la calle de la amargura. Muchos otros pequeños logros, fruto del tesón y constancia de nuestros técnicos, han sumado en estos años.

En cualquier caso, queda mucho por hacer y por mantener, que no hay que acomodarse ni despistarse.

Seguimos pidiendo y defendiendo desde todos los frentes, precios justos para el campo, porque no es posible que los bolsillos de la distribución y la industria se sigan llenando a nuestra costa y la de los consumidores.

Abogamos por poner en valor nuestras producciones y creemos que se deben incluir en una marca de la Comunidad de Madrid que las proteja de alguna manera. No basta con poner que se ha hecho en la Comunidad de Madrid cuando se ha envasado o procesado. Eso no marca la diferencia. Creemos que hay que destacar lo que ha salido de nuestro campo 100% y darle el valor que se merece.

Esta primavera promete ser más emocionante que nunca. Una megafiesta de la democracia que esperemos sea democracia de la buena, porque, como en todo, hay de la buena y de la rancia de naftalina y sofá listo con la forma de las posaderas.

Desde UGAMA animamos a todos los agricultores y ganaderos de la Comunidad de Madrid a que vayan a las urnas este 2 de abril y ejerzan su derecho (y su deber) de elegir a quienes trabajarán por ellos y por sus problemas cotidianos los próximos cuatro años.

Nosotros lo haremos con mucha ilusión, independencia y coraje, como lo hemos venido haciendo estos últimos años, siempre dando la cara.

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