Lo que está pasando en el campo extremeño es más propio de una plaga bíblica que de los factoes cambiantes de la climatología. Con una sequía que está acabando con la mayoría de los cultivos, con unas heladas que destrozan lo que quedaba, ahora se suma unas fuertes tormentas de lluvia que han dejado importantes daños en las explotaciones agrarias.

Según denuncia APAG Extremadura ASAJA, las fuertes tormentas del jueves 11 han dejado cuantiosos daños en explotaciones agrarias extremeñas y, aunque reconoce que si bien en estos momentos «resulta aventurado y poco riguroso ofrecer una estimación definitiva de las pérdidas, se prevé que las cuantía en muchas zonas de nuestra comunidad autónoma vayan a ser destacadas».

Se ha constatado que las fuertes tormentas han generado importantes estragos principalmente en las localidades de Don Benito, Torrefresneda, Santa Amalia, Hernán Cortés y Miajadas, donde cultivos como el tomate, maíz y frutales se han visto muy afectados.

De igual manera la cereza también cuenta con importantes daños, debido al mal tiempo que ha afectado especialmente al norte de la región extremeña.

Ante esta situación, APAG Extremadura ASAJA pide a la Consejería de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio que valore de forma inmediata las consecuencias de estas tormentas, tanto en superficie como en cultivos afectados. Asimismo, solicita a Agroseguro agilidad en la evaluación de los daños ocasionados con las peritaciones pertinentes.

(Foto principal: Jacha Jigo Jiguera‏ @jachajigo Tite Martínez Galardo)