EFE.- La Jornada Mundial de la Alimentación de 2011 se conmemoró hoy en la sede principal de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), en Roma.
En su discurso Diouf recordó que en la Cumbre Mundial sobre la Seguridad Alimentaria en 2009, la FAO pidió un aumento de la inversión en agricultura para producir más alimentos para los pobres y los hambrientos.
"Más de 80 millones de dólares en inversiones adicionales se requieren anualmente en la agricultura y las actividades para garantizar el suministro de alimentos hasta el año 2050", afirmó el director.
También se refirió a la volatilidad de los precios de los bienes alimentarios y a dos de las razones que la producen: por un lado, las relaciones cada vez más estrechas entre el mercado agrícola y el energético y, por el otro, la especulación financiera sobre los productos agrícolas.
"Para salir del riesgo de crisis -finalizó Diouf- que amenaza la estabilidad de los mercados alimentarios mundiales, necesitamos una mayor transparencia en los mercados", concluyó.
Por otro lado, la Confederación Italiana de Agricultores recordó que en el mundo hay casi mil millones de personas que sufren malnutrición, de los cuales 195 millones son niños.
"La inestabilidad de los mercados y la especulación financiera han transformado los alimentos en un ‘capital’ como todos los otros y han empujado a la pobreza absoluta a 44 millones de personas en menos de un año", dijeron representantes de la confederación.
Advirtieron de que si no se interviene inmediatamente existe el riesgo de que otras 34 millones de personas se hundirán en la indigencia.