En la actualidad, por cada grado alcohólico gravado en la cerveza con los impuestos especiales, las bebidas espirituosas (whisky, ron, ginebra, brandy, licores, vodka, tequila y anís) pagan 4,5 veces más por cada uno de ellos.   

    Ha subrayado que no ve las razones políticas que pueda haber por las que, con el sistema actual impositivo, "se benefician a unas empresas y a unas marcas y se perjudican a otras", sobre todo con empresas con tanta tradición de elaboración en el mercado español como la ginebra, que lleva produciéndose desde hace 200 años, o la del anís, pacharán el orujo o el whisky.

    "No tiene sentido que estén discriminadas frente a la cerveza", tan nacionales y tan buenas para la economía española son unas como otras", ha destacado.

     En este sentido, ha destacado que con el actual sistema impositivo, los 3.800 millones de litros de cerveza vendidos en 2012 aportaron a las arcas del Estado menos de 300 millones de euros, mientras que con los 205 millones de litros vendidos de bebidas espirituosas se recaudaron 745 millones de euros.

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