Los precios de los alimentos en origen se multiplicaron en junio por 4,23 hasta que llegaron al consumidor, según el IPOD (Índice de Precios en Origen y Destino) de los alimentos, elaborado por la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG). Los casos más sangrantes: el tomate de ensalada ha pasado de 0,28 euros/kilo pagado al productor a los 2,00 euros/kilo pagados por el consumidor.
Los alimentos de origen agrícola se multiplicaron por 4,53, mientras que los ganaderos lo hicieron por un 3,02, ha detallado la organización agraria en un comunicado.
Entre los productos hortofrutícolas, destaca el ajo, con una diferencia de 639% entre origen y destino, lo que significa que se multiplica su precio por 7,39, al pasar de los 0,75 euros/kilo iniciales a los 5,54 euros/kilo en la venta al público.
El aceite de oliva virgen extra registró el menor diferencial de precios, solo de un 26%
En el caso del brócoli, hubo una diferencia del 624 % (7,24 veces entre origen y destino), de 0,29 euros/kilo a 2,10 euros/kilo en el punto de venta.
COAG ha resaltado también la diferencia en los tomates de ensalada, un 614%, de 0,28 euros/kilo a 2,00 euros/kilo, 7,14 veces más.
Por el contrario, este IPOD el aceite de oliva virgen extra registró el menor diferencial de precios, de un 26 %, con 4,03 euros/kilo en origen y 5,08 euros/kilo en destino.
En los productos ganaderos, la mayor diferencia correspondió a la ternera 1ª, que se multiplicó por 4,09 (un 309%), con 3,96 euros en origen y 16,21 en destino.
Le sigue el cerdo, con una diferencia porcentual del 277%, lo que supone multiplicar 3,77 veces el precio entre origen (1,43 euros/kilo) y destino (5,39 euros/kilo).