La campaña electoral agraria enCastilla y León está arrancando con más tensión y enfrentamientos de lo que se podía esperar, hasta el punto de que las dicrepancias y acusaciones entre la Alianza UPA-COAG y Asaja puede acabar en los tribunales. Y el origen de esta disputa son las ayudas del ECyL a entidades sin ánimo de lucro para la contratación temporal de desempleados para la prestación de servicios de interés general y social, donde Asaja sale benficada, pero también Fademur, entidad de la mujer rural vinculada a la Alianza.

La primer piedra la lanzó la Alianza, que ha exigido al presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, que cese al consejero de Empleo, Carlos Fernández Carriedo, tras la resoluciónde una convocatoria de ayudas del ECyL de la cual Asaja-Ávila, «organización agraria no representativa», según la Alianza, es la principal beneficiaria, con 600.000 euros, «que les llega en pleno proceso de la campaña electoral agraria».

En el listado de beneficiarios, esa organización agraria está a la cabeza en la concesión de estos apoyos, por delante incluso de Cruz Roja de Castilla y León. Hemos denunciado que “es un insulto que se considere a Asaja de Ávila más importante que a Cruz Roja regional” en la contratación de desempleados con fines sociales. Por eso anuncian que van a reclamar explicaciones administrativas y políticas, «y nos reservamos el derecho de actuar judicialmente».

Asaja no descarta acciones legales y ritica «la poca vergüenza» de la Alianza

La respuesta de Asaja Avila no tardó en llegar, al acusar a la Alianza de «criticar y enturbiar» su labor, cuando esta misma organización agraria en Ávila ha solicitado el mismo programa y «les ha sido concedido por la Administración autonómica».

Asaja, que dice reservarse «el derecho a emprender las acciones legales pertinentes» no sólo contra La Alianza, sino también contra su coordinador autonómico, Aurelio Pérez, ha defendido haber solicitado «en concurrencia competitiva estas ayudas a las que todo el mundo ha podido optar tras su pública difusión a través del Boletín Oficial de Castilla y León (BOCyL)».

«Lo sorprendente del asunto es que la UPA de Ávila, a través de su Asociación de Mujeres del Campo de Ávila -Fademur-, ha solicitado y ha sido beneficiaria en esta misma convocatoria de ayudas a la que ha concurrido Asaja, por el total de contratos y cuantía que ha solicitado al ECyL», ha argumentado.

En este sentido, esta organización agraria considera que «hay que tener poca vergüenza para criticar y enturbiar la labor de Asaja, cuando ellos mismos han solicitado este programa y les ha sido concedido por la Administración regional».

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