La Consejería de Agricultura y Ganadería ha distinguido a la sección cunícola de la cooperativa segoviana Mesenor como organización de productores del sector lo que le permitirá agrupar las producciones de más de 25 explotaciones cunícolas de Castilla y León, Castilla-La Mancha y Extremadura.

Tal y como ha indicado la Consejería en un comunicado la producción comercializable de estas explotaciones supera el millón de animales anuales.

Asimismo, ha recordado que el objetivo de las organizaciones de productores es «concentrar la oferta y mejorar la comercialización», adaptando la producción a la demanda del mercado, optimizando los costes de producción, estabilizando los precios y fortaleciendo la posición de los productores.

En Castilla y León, además de Mesenor, están distinguidas otras cuatro organizaciones de productores del sector lácteo y once del hortofrutícola

También busca la mejora de la viabilidad de las explotaciones agrarias y su competitividad, ya que consigue que los productos comercializados tengan un valor más alto en el mercado, lo que repercute en la reestructuración y modernización de las industrias.

La carne de conejo representa el quinto tipo de carne más consumido tras el porcino, aves, vacuno y ovino-caprino y Castilla y León es la tercera comunidad autónoma en producción de conejo, tras Cataluña y Galicia, con más de 10.000 toneladas de carne en 2016.

Esto supone el 17 por ciento del total del país y es una cantidad duplica la producción registrada en esta Comunidad hace 10 años, además, España es uno de los principales productores mundiales de carne de conejo.

En Castilla y León, además de Mesenor, están distinguidas otras cuatro organizaciones de productores del sector lácteo y once del hortofrutícola.

La Consejería de Agricultura y Ganadería ha comprometido también una ayuda de 2,5 millones de euros para el fomento de organizaciones de productores en el marco del Programa Nacional de Desarrollo Rural 2014-2020.

La primera anualidad, que es la de 2018, cuenta con una dotación de 500.000 euros y consiste en una ayuda máxima del 10 por ciento del valor de la producción comercializada, con un límite de 100.000 euros por año, según ha detallado la Consjería.

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