Según Rubio, ahora los restaurantes tienen que afrontar no sólo la caída de las ventas, sino que el margen que le queda a cada establecimiento es menor, ya que "hemos pasado de ser un sector donde los precios subían por encima del IPC, a subir la mitad de lo que lo hace este índice, mientras que el resto de los costes siguen creciendo".
Los cierres han supuesto la pérdida de 100.000 puestos de trabajo de los 1,4 millones de personas que trabajan en este sector, ha precisado.
Rubio ha recordado que este sector representa el 6% del PIB nacional y la microempresa -establecimientos con menos de 5 trabajadores- supone el 90 % de las compañías de este sector.
De los cerca de 300.000 establecimientos existentes en el sector, los bares (200.000) hacen el 43% de las ventas; los restaurantes y las cafeterías (72.000), el 34%; las empresas de colectividades (13.000), el 9 %; y los establecimientos de alojamiento (17.000), el 14%.
Ser más competitivo es, según ha subrayado Rubio en su intervención, una de las claves del sector, "lo que significa gestionar mejor, incrementar las ventas y los beneficios, reducir los gastos, optimizar los recursos y ganar más clientes".