EFE.- La nueva normativa, que regula el derecho a la información sobre los alimentos, incluye como novedades la obligación de que las letras de las etiquetas tengan un tamaño mínimo de 1,2 milímetros, así como que todas las carnes indiquen el país de origen.

Además, los productos envasados tendrán que mostrar en su etiqueta la información nutricional y los alérgenos alimentarios.

Sin embargo, la organización ha considerado, en un comunicado, que la norma tiene algunas carencias, como que "se haya decidido que la información nutricional no necesariamente deba estar en el frente del paquete".

La OCU ha criticado también que no sea obligatorio incluir la cantidad de ácidos trans y que las bebidas alcohólicas no tengan que acogerse al mismo etiquetado que el resto de productos.

Por ello, esta organización va a "instar a la Comisión Europea para que cumpla con su promesa y desarrolle estas directrices en un plazo razonable".

La organización de consumidores ha expresado su deseo de que, en regulaciones futuras, se obligue a etiquetar los ácidos grasos o se restrinja completamente su consumo por ley.

×