Dicen qur todo buen escribano comete alguna vez un borrón y el que esto suele suscribir nunca ha tenido claro que ni siquiera llegue a ser sólo escribano, con lo que se pueden imaginar los borrones que crea constantemente. El último, a tenor de los más de 40 comentarios recibidos, ha sido con el titular, más que con la noticia, de «A los agricultores y ganaderos les ‘toca’ la Lotería: Las CCAA empiezan a abonar la PAC que restaba».

Muchos lectores se han sentido ofendidos por este titular al considerar que se está despreciando el trabajo que realizan agricultores y ganaderos. Y una cosa es hacer un borrón y otra, muy distinta, querer ofender a nadie. Por eso sirva este espacio para pedir sinceramente perdón por quien se haya sentido ofendido por este titular.

Pero también quiero, sin que nadie más se ofenda, ‘defenderlo’. En la vida nunca se cierta del todo y la intención era símplemente hacer un juego de palabras entre dos acontecimientos especiales de ese día. el sorteo de la Lotería y los pagos de la PAC. Ni más ni menos y así creo que lo entendieron de igual forma el más de un centenar de lectores que, en contraposición a las críticas, si señalaron que les había gustado la noticia.

Se critica que un «medio serio» no debería apostar por este tipo de titulares y pueden tener razón, pero también pueden equivocarse. El periodismo es información (y nadie se ha quejado de la información en sí misma, sino sólo del titular) pero también debe tener una parte más ligera de atracción. Exponer sólo los hechos («Las CCAA pagan la PAC») está bien pero a la larga aburre y me parece necesario e interesante darle algo más de interés a la noticia.

Insisto en que no se ha querido ofender a nadie, que puede en este caso me haya equivocado, o por lo menos para esas 40 personas sobre las más de 4.500 visitas que ha tenido hasta el momento la noticia, pero también insisto en que mi concepto de periodismo es quizás distinto y que además de informativo debe ser divertido o por lo menos atractivo, tanto para el lector como para quien lo hace.

De los errores se aprende y uno ya tiene muchos años como para saber que a veces se acierta y otras, no, pero también que nunca se ha querido ofender a nadie y que si alguien se ha sentido así sólo se le puede pedir disculpas.

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