Las autoridades rusas decidieron imponer a finales del pasado enero restricciones a la importación de carne de cerdo procedente de todos los países de la UE, después de que se registrara un brote de peste porcina en Lituania. Posteriormente, se han detectado casos de esa enfermedad también en Polonia.

    El Ejecutivo comunitario ha reiterado en diversas ocasiones que la respuesta de Moscú ha sido desproporcionada y ha asegurado que el problema de la peste porcina solo se da en áreas limitadas.

    Pese a los intentos de Bruselas por poner fin a la medida, Rusia no ha retrocedido en su prohibición.

El conflicto de Crimea ha tensado las relaciones entre la UE y Rusia


    Las relaciones entre la UE y Rusia, más allá de esta cuestión comercial, se han tensado a raíz de la crisis política en Ucrania, el acercamiento de Kiev hacia el bloque comunitario y la anexión de Crimea por parte de Moscú.

    Por otra parte, el Ejecutivo comunitario pidió explicaciones en marzo a Austria sobre un supuesto acuerdo bilateral entre Viena y Moscú para levantar el embargo, en virtud del cual Austria habría exportado a Rusia carne de cerdo.

    Los principales suministradores de carne de cerdo en la UE a Rusia son Holanda, Alemania y Dinamarca, según datos de la Comisión Europea.

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