EFE.- Preocupados por el peligro de desaparición de los humedales costeros del Mediterráneo, algunos considerados patrimonio mundial, expertos internacionales se reúnen en Madrid para elaborar la estrategia de conservación que se presentará en el 6 Foro Mundial del Agua, el próximo mes de en marzo en Marsella.

La reunión, que se celebra hoy y mañana en la sede del Instituto Instituto Geológico y Minero de España, pretende "analizar el estado de los ecosistemas dependientes de las aguas subterráneas en el entorno del Mediterráneo".

Producto, en parte, del cambio climático, esas áreas sufren procesos de sequía, salinización y contaminación que provocan "graves pérdidas en sus valores ecológicos", según señala un comunicado del Instituto.

El encuentro está patrocinada por el Programa Internacional Hidrológico de la Unesco y la Alianza Estratégica para el Gran Ecosistema Marino del Mediterráneo (MedPartnership) del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma), del Plan de Acción para el Mediterráneo (PAM) y del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM).

"Es necesario entender mejor el agua, como un recurso mineral y por los servicios que proporciona en los ecosistemas para identificar y cuantificar los puntos críticos que controlan la interrelación de la hidrología con los seres vivos y su contribución a la sostenibilidad ambiental", agrega la nota.

Durante el foro, se revisarán las metodologías existentes sobre la gestión ecohidrológica de los ecosistemas dependientes de las aguas subterráneas, especialmente en zonas críticas (zonas áridas, zonas costeras, islas pequeñas) y se identificarán las mejores prácticas disponibles para mitigar los impactos del cambio climático en los humedales.

Parte de la agenda se dedicará a investigar los requisitos para realizar un inventario de humedales costeros dependientes de las aguas subterráneas en la cuenca mediterránea.

La cuenca mediterránea, sostienen los expertos reunidos en Madrid, es un ejemplo regional de elevado valor ecológico y socioeconómico y soporte natural de hábitats de rica y variada biodiversidad y punto de descanso de aves migratorias.

Tipos concretos, como los acuíferos kársticos costeros, muy vulnerables, o humedales costeros patrimonio histórico de la Unesco, como los parques de Ichkul, en Túnez, unido al mar por un sistema de canales romanos, se están secando, salinizando o están siendo contaminados, con el consecuente declive de sus funciones hidrogeológicas y pérdida de valores ecológicos, indican.

Los principales impactos identificados contra estos ecosistemas costeros son la sobrexplotación de las aguas subterráneas, vertidos de aguas residuales e industriales, canalizaciones y el desarrollo de zonas urbanas.

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