Alrededor de medio millar de ganaderos lácteos gallegos han vuelto a salir a la calle para criticar la continua bajada de precios de la leche y el «papel mojado» en el que se ha quedado el acuerdo lácteo que sirvió para desbloquear la situación y frenado las anteriores tractoradas de hace ahora un año.
Los ganaderos han retomado sus protestas en las calles de Lugo tras un año de «promesas incumplidas», convocados por Agromuralla.
denuncian el cierre de 600 granjas gallegas y la bajada de 2,5 céntimos por litro en origen
La protesta ha ido encabezada por una pancarta con el lema ‘Somos gandeiras por pouco tempo’ , aunque a diferencia de las pasadas movilizaciones, los ganaderos lácteos gallegos han incidido no solo en el pesimismo ligado a los precios, sino también en los «cierres masivos» de explotaciones.
Según han destacado algunos productores, los abandonos se sitúan en 600 granjas que daban trabajo a unas 1.000 personas en el medio rural. «El compromiso de buenas voluntades no funcionó, se les dejó seis meses y nadie cumple nada, los perjudicados somos siempre los mismos», ha subrayado Odón Castro, portavoz de Agromuralla.
«Hicieron un compromiso que benefició a algunos, pero no a nosotros», ha remarcado Castro, antes de enfatizar que los nuevos contratos se están firmando a la baja, estimando unas caídas de dos céntimos y medio en el precio del último año.
Tras la protesta, que fue más suave en cuando al tráfico y a la movilización de los propios ganaderos con respecto a hace un año, Agromuralla ha anunciado que no descarta nuevas movilizaciones. De hecho, según han apuntado, las estudiarán en las reuniones que están teniendo permanentemente para evaluar la situación.
«Son medidas a tomar entre todos los socios, para hacer presión y también para proponer medidas que nos favorezcan», ha finalizado Castro.
(Fotods: Twiter)