Soriano afrontó ayer martes la segunda jornada de trabajo en Bruselas para trasladar la postura de Castilla-La Mancha de cara a las negociaciones de la futura Política Agraria Común (PAC) 2014-2020.

   La titular de Agricultura ha recordado que por primera vez el Parlamento Europeo tiene derecho de veto sobre los presupuestos de la UE y ha sostenido que "siempre ha sido mucho más sensible a las necesidades del sector agrario que otros estamentos comunitarios".

   Soriano pide a los europarlamentarios que sigan trabajando junto al Gobierno español en la búsqueda de aliados ya que a los apoyos tradicionales de países mediterráneos y del Este se unen "otros muchos partidarios en los países del centro y norte que pueden ser un contrapeso muy importante ante las intenciones de recorte presupuestario de algunos estados importantes", ha dicho.

   La titular de Agricultura ha insistido en que el primer objetivo de la Junta es contar con una ficha financiera "lo más cercana posible a la actual" y ha precisado que con la propuesta inicial del Consejo Europeo, el campo castellanomanchego podría dejar de percibir 170 millones de euros al año, es decir, el 17 por ciento de los fondos actuales.

   Soriano asegura que tras la Cumbre Europea de la semana pasada el Gobierno español ha conseguido "avances significativos", pero también afirma que "tenemos que seguir trabajando y buscando alianzas para mejorar una propuesta que sigue sin gustarnos ni al Ejecutivo de Mariano Rajoy ni a la Junta", ha apuntado.

   En este sentido, ha resaltado la importancia de contar en esta negociación con el "apoyo firme de Francia e Italia, cuyos sectores agroalimentarios comparten nuestra misma filosofía y que son conscientes del importante papel que juega y jugará el campo en el futuro de Europa, tal y como lo ha jugado en el pasado"

×