EFE.- Este año fueron sembradas 3.201 hectáreas del tubérculo, lo que representa el 57,3 % de la siembra anterior, que ya «fue muy inferior a las que se realizaban antes del año 2010; y es solo el 17,4 % de la mayor (registrada en 1990)», indicó el semanario Trabajadores en un artículo titulado «Añoranza por la papa».
«La papa no alcanza para todos. El incremento de los costos de los insumos en el mercado mundial -asediado por la crisis económica y la especulación de los precios- conllevaron a la drástica reducción de las siembras en la actual campaña», señala el artículo.
La papa dejó de comercializarse por la cartilla de racionamiento desde hace varios años y los consumidores la adquieren de manera «liberada», sin limitaciones, a 1 peso cubano la libra (equivalente a 0,05 centavos de dólar).
De acuerdo con especialistas del ministerio de la Agricultura (Minag) de la isla citados en el reportaje, el cambio climático también afecta el rendimiento de la recolección papera que comenzó el pasado 19 de febrero y debe tener su momento culminante entre finales de este mes y principios de abril.
Indicaron que las altas temperaturas registradas durante esa etapa, de hasta 30 grados centígrados, inusuales en otros tiempos en la isla, no han permitido el crecimiento óptimo del fruto y ha provocado que su tamaño sea pequeño en esta cosecha.
Los gastos de esta campaña papera rondan los 15 millones de dólares, de los que unos 4,4 millones se destinaron a la importación de semillas compradas en Holanda, Francia y Bélgica, detalló el reporte.
Esa cifra contrasta con los 40 millones de dólares para cada cosecha que se llegaron a invertir en la semilla importada en las épocas de mayores producciones en la isla.
La mayor área sembrada de papa en la isla se registró en el periodo 1990-1991 con 18.428 hectáreas y la producción más elevada, de 372.681 toneladas se logró en el 2000, precisó la fuente.