EFE.- El presidente del colectivo, Miguel Gutiérrez, ha explicado en un comunicado que el pasado 2 de julio tuvieron conocimiento a través de sus socios y otros agricultores de la puesta en circulación de pequeñas partidas de mangos de la variedad Osteen en la comarca malagueña de la Axarquía, la principal región productora de España.

Según Gutiérrez, la importancia no radica en el mínimo volumen de negocio o la pequeña cantidad de fruta comercializada, «sino en el tremendo daño» que se hace a la imagen del mango, los canales de comercialización y la confianza del consumidor.

Ha informado de que en estas fechas, el mango cultivado en la Axarquía o en la Costa Tropical de Granada está completamente inmaduro, ya que se encuentra en pleno proceso de crecimiento y desarrollo, por lo que es incapaz de alcanzar su maduración una vez separado del árbol «y acabará seguro en el cubo de la basura del comprador».

«Nunca antes habíamos visto mangos a la venta en estas fechas, más de un mes antes de que se pueda aconsejar siquiera el comienzo de la campaña de recolección», ha añadido Gutiérrez.

El colectivo ha señalado que el principal perjudicado es el consumidor que adquiere esta fruta inmadura y que verá defraudadas todas sus expectativas, con lo que perderá la confianza hacia el producto y en el mejor de los casos, tardará tiempo en recuperarla.

Por ello, la asociación ha pedido a los consumidores que no adquieran mangos supuestamente españoles hasta bien iniciado agosto, puesto que en esas fechas sólo serán aptos para el consumo las variedades Tommy Atkins e Irwin, junto a una pequeña cantidad de Osteen que necesariamente ha de provenir de invernadero.

Una vez iniciado septiembre, principal periodo de recolección junto a octubre y noviembre, «no deberían darse graves problemas de madurez o calidad en ninguna de las variedades que se cultivan en la zona».

Gutiérrez ha manifestado que «estas conductas aisladas y completamente irresponsables y reprobables» han sido comunicadas a los Servicios de Agricultura de la Junta y al Ministerio, a los que se ha pedido que extremen sus controles y vigilancia «por si fueran constitutivas de infracción y sancionables».

Ha insistido en que la circulación de mango inmaduro no sólo perjudica el futuro del sector de esta fruta, sino que también puede incitar el temido comienzo de la temporada de robos en los campos.

La Asociación Española de Productores de Frutas Tropicales, con sede en Vélez-Málaga (Málaga), cuenta con 170 socios que suman una superficie de más de 1.590 hectáreas repartidas entre las provincias de Huelva, Cádiz, Málaga y Granada.

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