EFE.- Así lo ha señalado la alcaldesa de la ciudad, Rita Barberá, durante la inauguración del primer Certamen Internacional de la Rosa celebrado hoy en la rosaleda Doctor López Rosat de los Jardines del Real, en la que ha estado acompañada, entre otras autoridades, de la concejala municipal de Parques y Jardines, Lourdes Bernal.
«Estos días reivindicamos la cultura de la rosa en la ciudad, que aspira a ser también referente internacional en el arte de su cultivo y su exhibición», ha destacado la alcaldesa, quien ha reclamado también el «protagonismo urbano» de esta flor dentro del «compromiso municipal» con el medio ambiente.
Barberá ha explicado las diferentes actuaciones municipales con la rosa como protagonista y, entre otras, ha destacado la edición de «El libro de la rosa», en cuyas páginas se detallan las diferentes variedades de rosas en la ciudad, su localización y características.
Igualmente, ha mencionado la creación del primer circuito de la rosa, en el que a lo largo de tres kilómetros se pueden recorrer «las dieciséis rosaledas más emblemáticas» de Valencia, entre ellas, la del propio Jardín del Real, que, según Barberá, «invita a pasear y disfrutar entre sus más de 10.000 rosales».
El circuito también contempla la visita a las rosaledas del Palau de la Música, del MuVIM, del Palacio de Congresos, del tramo III del Jardín del Turia, de la estación de Fusta o de los jardines de Monforte o Albalat dels Tarongers, entre otros.
Entre las actividades en torno al mundo de la rosa, Barberá también ha destacado una muestra de pinturas al óleo, talleres sobre plagas y enfermedades y una exposición en el centro Naturia de rosas realizadas con materiales reciclados como cartones de huevos o botellas de plástico.
Además, ha subrayado la celebración del primer concurso internacional, «abierto no sólo a los valencianos sino a personas de cualquier parte del mundo que quieran aportar su saber y buen hacer en el cultivo de la rosa», tanto en la modalidad de maceta como en la de flor cortada.
Organizado en colaboración de la Asociación Española de la Rosa y la Asociación de Plantas de la Comunitat Valenciana, el concurso se convertirá, según ha augurado Barberá, «en cita anual y creciente, obligada y seguida por los amantes de las flores y la horticultura».