El grupo Lactalis ha solicitado la mediación del Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente en el conflicto que mantiene con Unións Agrarias (UU.AA), un litigio que ha acabado en el Juzgado de Vilalba por un supuesto caso de apropiación indebida por parte de la multinacional francesa. Desde UUAA se recuerda que el Ministerio de Agricultura ya actuó como mediador en dos ocasiones y que la industria láctea no aceptó esta intermediación porque se le instaba a pagar a los ganaderos.

Mediante un comunicado, Lactalis señala que lo que ha solicitado es la mediación del Ministerio de acuerdo con su «rol de garante del Acuerdo para la estabilidad y sostenibilidad de la cadena de valor en el sector del vacuno de leche», suscrito el 23 de septiembre de 2015.

«El grupo Lactalis se reafirma en su compromiso con dicho acuerdo, que también fue firmado por Unións Agrarias-UPA», por lo que insta al sindicato «a aceptar la mediación del Ministerio».

UU.AA: «Lactalis tiene que pagar o decidirá la Justicia»

Por su parte, Unións Agrarias, que ha recordado que el Ministerio de Agricultura ya actuó como mediador en dos ocasiones en el conflicto, ha sido claro al señalar que Lactalis «llega tarde» para pedir esta intermediación, según ha indicado su responsable de Servicio, Óscar Pose.

Ha añadido que ahora sólo tiene dos opciones, «o pagar lo que debe o que decida la Justicia», habida cuenta de que se ha iniciado un proceso en el Juzgado de Vilalba por un supuesto caso de apropiación indebida.

De hecho, Pose aseguró que «hemos llegado a esta situación» precisamente porque Lactalis no hizo caso a la mediación del Ministerio en las dos ocasiones previas.

«Nos dio la razón y los instó a pagar», dijo el portavoz sindical a EFE, pero «no lo hicieron» y ahora «llegan un poco tarde».

El sindicato confía en que la Justicia le «dé la razón» y obligue a la multinacional francesa Lactalis a pagar los casi 3 millones de euros que ha dejado de ingresar en la cuenta de sus proveedores de leche, por quedarse supuestamente con la subida de dos céntimos de euro por litro pactada con la distribución tras las movilizaciones de principios del pasado año.

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