La sectorial de la fruta dulce de JARC-COAG ya ha planteado oficialmente la posibilidad de reducir la oferta a través de un Plan de arranque y abandono, similar al que se hizo en 1992, aunque dejando claro que se tiene que reducir la producción sin arruinar a los labradores, por lo que sería necesaria una indemnización a aquellos fruticultores que opten por esta medida.

De igual forma, ha pedido a los representantes de todas las Centrales de Compra que tomen partido de forma urgente para contrarrestar la crisis de precios que se arrastra desde hace cuatro años al sector de la fruta dulce.

En este tema concreto, los pide que redirijan la fruta que hace un mes que está en las cámaras hacia transformación en zumos y que no muevan ni un kilo de fruta más sin tener asegurado un precio que también sea adecuado para los labradores.

Pleno apoyo a cualquier manifestación para reclamar un precio en origen digno

“Todos tenemos que hacernos respetar y hacer cumplir la Ley de la Cadena Alimentaria, porque al paso que vamos haremos chasquear la producción de fruta, o como mínimo, a los productores pequeños y medios”, indica David Borde, responsable sectorial de fruta dulce de JARC-COAG.

De igual forma, y a pesar de considerar que las manifestaciones de productores, desgraciadamente, no están resolviendo el problema de los precios, JARC-COAG ha dejado claro su apoyo a todas las protestas que se convoquen, como la de este viernes 18 en la Rotonda sobre A-2, Salida 446, SOSES (Lérida).

“Paralelamente, estamos exigiendo en el Gobierno del Estado y de Cataluña, que ponga en marcha un urgentemente un paquete de medidas para revertir la situación”, afirma Borde. “Este mes hemos hecho llegar nuestras demandas a la consejera de Agricultura y a la Ministra del ramo, y seguiremos hasta donde haga falta”, añade.

MEDIDAS DE UN PLAN DE CHOQUE RECLAMADO POR JARC-COAG

Ante la situación de crisis que vive todo el sector esta organización agraria exige activar mecanismos de regulación de mercado diferentes, que se centran en un Plan de Choque con medidas concretas.

Así, solicitan más retiradas de producto, pero asegurando que las compensaciones llegan al labrador. «Hace cuatro años que se están usando unos sistemas de retirada que no están resolviendo la problemática de los precios. Hay que poner en marcha sistemas no usados hasta ahora (cosecha en verde o no cosecha) y plantear que se creen de nuevas alternativas», como la citada y planteada oficialmente a la Generalit del arranque y abandono de frutales.

De igual forma, exigen la condonación de las cuotas de la Seguridad Social, ayudas y moratorias para los préstamos contraídos y la reducción a cero del módulo del IRPF aplicable a la renta 2017, entre otros, así como reducir la oferta a través de un Plan de arranque y abandono, similar al que se hizo en 1992. «pero se tiene que reducir la producción sin arruinar a los labradores».

Creación de una marca “Q” y seguros agrarios más económicas por los profesionales

Asimismo, se pide establecer un distintivo que identifique la fruta de calidad superior, determinando qué parámetros tienen que tener los productos que se comercialicen bajo este paraguas y ofrecer un mecanismo que permita certificar la fruta Premium, según unos atributos gustativos y visuales objetivos, avalando un precio remunerador para el labrador y asegurando la máxima calidad al consumidor.

También exigen un incremento del presupuesto estatal y autonómico para apoyar a la contratación de seguros de fruta, priorizando en la asignación de recursos los Agricultores Profesionales (AP) y las Explotaciones Agrarias Prioritarias (EAP), y ofreciendo mejores condiciones a los jóvenes que se incorporan.

Finalmente, insisten en que se debe sancionar las conductas comerciales abusivas y especulativas, controlar la existencia de contratos con un precio de venta fijado objetivamente y conseguir que la fruta se pague a 30 días desde la fecha de entrega. También es importante que se haga un control de calidad y etiquetado en los puntos de venta.

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